EL ANUNCIO DEL
RAPTO DE "ANDRÓMEDA"
RAPTO DE "ANDRÓMEDA"
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En
otro estudio nos referimos al significado del transito de Venus por el
sol en la astronomía inspirada. Fue a propósito del que se produjo el 8
de junio del 2004 (Ver: “La historia de Andrómeda, Perseo y el caballo Pegaso”) En esa oportunidad vimos por ejemplo que nuestro Señor dice de Si mismo en Apocalipsis 22:16:
“…Yo soy la raíz y el linaje de David,
la estrella resplandeciente de la mañana”
la estrella resplandeciente de la mañana”
como
queriendo darnos una clave importante para los últimos días. Y lo
repite en otras ocasiones en este mismo libro. Él se identifica entonces
en estos días con Venus: el “lucero resplandeciente de la mañana”. Esto
es, lo hace su mensajero en los cielos, y cuando este astro se pone en
evidencia como lo está haciendo en estos días es porque esta queriendo
pasarnos un mensaje importante. El 6 de junio de este año -2012 –
Venus volverá a cruzar el disco solar y, además de la belleza
intrínseca que tienen estos acontecimientos celestiales, podremos
recibir el anuncio del “Lucero Resplandeciente de la Mañana”, es decir,
de Aquel que se hace representar en este caso por este astro que de
hecho es Su creación y ejecuta en estos días Sus señales como todos los
otros:
"¿Conoces las leyes de los cielos?
¿Dispones tú su dominio en la tierra?"
Job 38:33
¿Dispones tú su dominio en la tierra?"
Job 38:33
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Digamos
que el tránsito de Venus por el Sol ocurre dos veces seguidas cada 122
años. Esta vez la primera fue en el 2004 (a la que nos referimos) y la
segunda lo será el 6 de junio de este año. Y luego tendrán que pasar 122
años (si este cielo y esta humanidad existen todavía sobre la tierra)
para volver a ver un nuevo tránsito de Venus por el sol. Pero creemos
que este no se producirá, y el que veremos el 6 de junio que viene será
el último.
Aplicando
el mismo método que utilizamos en ocasión del primer estudio, es decir,
leyendo las constelaciones que están en el cenit de Jerusalém en el
momento del transito solar de Venus el 6 de junio de este año, tenemos
que esta vez el centro del mensaje es el “caballo Pegaso” llevándose a
“Andrómeda” hacia el cielo. La pura escena del rapto. ¿Habrá otro
mensaje después de éste? Este es el cenit del cielo sobre Jerusalém ese
día al amanecer que es la hora del transito solar de Venus:
Vimos que la constelación que los griegos llamaron “Andrómeda” representó en sus orígenes, en la interpretación inspirada, a la “virgen de Sión”/”hija de Sión” que es la iglesia de Cristo. Y en este caso este término -"iglesia"- no se refiere a la congregación que vemos reunida en los templos en donde se mezcla el trigo y la cizaña, sino a la Iglesia que solo Jesús/Yeshua conoce formada por el remanente fiel. También podemos llamar a la Iglesia representada por “Andrómeda”: ISRAEL DE DIOS/ redimidos/escogidos y fieles. Pues bien, "Venus" en su tránsito solar nos anuncia que ha llegado el momento de que “Andrómeda” sea rescatada de este mundo y llevada al cielo, a las bodas del Cordero.
Este
es un mensaje de aliento seguramente ya que, por la contraria, anuncia
que lo que está a punto de acontecer –y vemos señales por todos lados-
será muy duro. Tanto que al final será necesario evacuar de esta tierra a
los que confiesan y son de Cristo. Lo que viene es la “gran
tribulación”. Una como nunca hubo antes ni habrá después, en la que el
planeta será sacudido en sus cimientos tal como es sacudida una “choza”
por una gran tempestad. Y el pánico mundial que veremos será tal que los
gobiernos mas poderosos de la tierra acordarán entregar el mando por
breve tiempo a una persona –la bestia- que habrá realizado señales y
prodigios que engañaran a muchos, y aun confundirán a algunos escogidos
de fe vacilante. Este personaje prometerá poner las cosas en orden
utilizando medidas drásticos que incluyen eliminar al Estado de Israel
del mapa y perseguir a muerte “a los que obedecen los mandamientos de
Dios y siguen fieles al testimonio de Jesús” (Ap. 12:17). Por eso es
urgente tener una fe completa, incorruptible y sin vacilaciones -como
las vírgenes prudentes- en la Promesa de Su Venida. Todas estas cosas
nos anuncia el transito de Venus por el disco solar del 6 de Junio.
El
“caballo Pegaso” que esta jalando de “Andrómeda” alejándola del malvado
“Cetus” que intenta devorarla (ver el artículo antes citado) significa
la suma de las bendiciones celestiales que esperamos los creyentes. Y
estas dos constelaciones –“Andrómeda” y “Pegaso”- tienen una
particularidad única: comparten una misma estrella. En efecto la
estrella “alfa” de Andrómeda cuyo nombre es “Alpheratz” –que significa
”cabeza de la mujer encadenada”- es también la estrella “delta” de
Pegaso que está en su parte posterior, como si el caballo “arrastrara” a
“Andrómeda” violentamente en su dirección, que es hacia el cielo. Este
es el único caso en el fresco que titila en el firmamento que una
estrella es compartida por dos constelaciones y tiene un obvio
significado: las bendiciones celestiales –“Pegaso”- están
indisolublemente atadas a la “virgen de Sión”/ “hija de Sión”/iglesia
verdadera de Cristo/ ”Andrómeda”. Que es como decir que el destino de
los redimidos por la sangre del Cordero -los creyentes- está determinado
firmemente desde antes de la fundación del mundo. Y ese destino está
definido en el cielo al que pertenecen, y por lo tanto no lo afecta las
circunstancias de esta tierra, de la que son evacuados. Veamos un
esquema de las dos constelaciones en donde podemos ver que hay una
estrella que pertenece a las dos:
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Pues bien estas dos constelaciones así unidas indisolublemente una con otra son las que se verán en el cenit de Jerusalém en el momento del tránsito solar de Venus el 6 de Junio de este año -2012-.
Por
supuesto que esta escena es parte de la que se contaba en el transito
solar de Venus en el 2004, pero en aquel entonces el énfasis estaba en
“Perseo”, que es la constelación que representa al príncipe perdidamente
enamorado de Andrómeda -una representación del Señor y su amor
indisoluble y eterno por su Iglesia verdadera (Rom. 8:35)-. "Perseo" da
muerte a “Cetus” –Satanás- cuando está a punto de devorar a la indefensa
"Andrómeda" y luego monta el caballo Pegaso llevándola presurosamente
al cielo. Y allí contrae matrimonio con ella. ¡Aleluya!.
En
otro artículo hablaremos de señales en el cielo del 2012 que ya pasaron
y anunciaron el REINO y de otras en la tierra que esconden una insidia
sobre la cual es necesario alertar.
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